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La Atención by Mind Map: La Atención

1. ¿Qué es? La atención es un proceso psicológico cognoscitivo básico e indispensable para el procesamiento de la información, sustentado por el complejo sistema neuronal, encargado de controlar toda actividad mental. La atención es una cualidad de la percepción que funciona como una especie de filtro de los estímulos, evaluando cuáles son los más relevantes y dotándolos de prioridad para un procesamiento más profundo. La atención consiste en un proceso selectivo de la información necesaria, la consolidación de los programas de acción elegibles y el mantenimiento de un control permanente sobre el curso de los mismos.

2. Tipos de atención. La atención es el proceso de concentración y focalización que implican diversas fuentes de información. De modo que es una cualidad que permite centrarse de manera espontánea y voluntaria en un estímulo. Hay diferentes tipos de Atención con una perspectiva fundamental de mecanismos implicados en su ejecución, entre los distintos tipos más comunes podemos encontrar los siguientes: la atención sostenida, atención selectiva, atención alterna, atención dividida, atención interna, atención externa, atención abierta, atención encubierta, atención voluntaria y la atención involuntaria. De acuerdo a los mecanismos utilizados por el individuo se habla de: Atención selectiva: esta atención es la habilidad que tiene un individuo para responder a los aspectos que requiere una determinada situación o actividad y lograr apartar a todas aquellas que no resulten indispensables para llevarlas a cabo. Atención sostenida: esta clase de atención se da cuando una persona necesita permanecer consciente sobre los requisitos para llevar a cabo una determinada actividad y poder desempeñarla durante un largo período de tiempo. Atención dividida: alude a aquella habilidad que tiene una persona de atender a por lo menos dos estímulos al mismo tiempo. También se le llama atención divida aquella que, frente a una carga de estímulos, el individuo logra repartir sus recursos atencionales para así poder desempeñar una tarea compleja. De acuerdo al nivel del control de voluntad que exista se habla de: Atención involuntaria: ésta está vinculada con el surgimiento de algún estímulo que resulte nuevo, significativo y fuerte que, tras la monotonía o repetición, desaparece. Esta atención se caracteriza por ser emocional y pasiva ya que la persona no se dirige hacia el objeto o situación intencionalmente ni tampoco ejerce ningún tipo de esfuerzo. Además, esta atención no está vinculada con los motivos, necesidades o intereses inmediatos del individuo. Atención voluntaria: es la desarrollada a lo largo de la niñez, por medio del aprendizaje escolar y el lenguaje. La atención voluntaria se alcanza luego de que el niño tiene la capacidad de señalar objetos así como también nombrarlos independientemente de sus padres. Esto indica entonces que la atención voluntaria es el resultado del desarrollo de la involuntaria y, una vez adquirida, el individuo pasa de una a otra constantemente.

3. ¿Se puede fortalecer o recuperar la atención sostenida? La atención sostenida, en particular, corresponde a la habilidad para mantener una respuesta de comportamiento constante durante una actividad continua o repetitiva. Gracias a la neuroplasticidad, es decir, la capacidad que tiene el cerebro para modificarse estructural como funcionalmente, se puede mejorar o compensar los déficits cognitivos en tanto en cuanto se lleve a cabo una rehabilitación apropiada. Hasta hace poco los programas de rehabilitación de la atención sostenida se han basado en tareas de lápiz y papel, comúnmente denominadas fichas. Un ejemplo de este tipo de ejercicios para la atención sostenida son las tareas en las que la persona debe contar el número de estímulos que se le presenta en una hoja. No obstante, durante los últimos años, el auge de las nuevas tecnologías (TIC) ha dado paso a un creciente uso de estas herramientas digitales para la implementación de nuevos programas de rehabilitación cada vez más eficaces. En este sentido, existe una variedad de programas informatizados cuyo enfoque se basa en la repetición de tareas atencionales de dificultad ascendente con el fin de restaurar las redes neuronales de la atención.

4. ¿Es la atención un proceso automático o un proceso controlado? El sistema de procesamiento mental del ser humano tiene una organización jerárquica; desde los procesos más simples, como la percepción sensorial, a los más complejos, como el razonamiento. Este orden, lejos de ser secuencial, es un proceso coordinado en el que las múltiples áreas cerebrales interactúan en paralelo dando lugar al aprendizaje, al conocimiento y al comportamiento organizado que nos caracteriza, considerándolo dentro de la normalidad. Se han definido dos tipos de procesamiento, los procesos automáticos y los procesos controlados. La atención es un proceso controlado. Un ejemplo de procesamiento controlado sería aprender a conducir; el principiante necesita prestar mucha atención a todas las señales que aparecen a su alrededor, anticiparse a cada movimiento y difícilmente le sobrarán recursos atencionales para entablar conversación con su acompañante. El conductor experto, sin embargo, activará los procesos automáticos, facilitando que pueda estar pendiente de muchas más cosas al mismo tiempo, como mirar a sus hijos a través del retrovisor, a la vez que se detiene ante un semáforo pisando freno y embrague, reduciendo de marcha e incluso bajando el volumen de la radio.

5. Trastornos de la atención. Desde esta perspectiva (Siegel, 1999), la atención sería una función de base profundamente relacionada con las emociones en cuanto: permite orientar al organismo detectando estímulos peligrosos o agradables en el ambiente, generando una respuesta de acercamiento o escape. Por distracción (o desatención) se entiende la reducción de la capacidad de atención sobre objetivos específicos (de concentración), a causa de la interferencia de estímulos menores y secundarios Trastornos de la atención Los trastornos de la atención se encuentran entre los síntomas de diferentes trastornos psicopatológicos, tanto orgánicos como funcionales; pero pueden encontrarse también en personas normales, especialmente en condiciones de estrés, intensa emotividad o cansancio. Hipoprosexia (disminución de la capacidad de atención). Se trata de una disminución del nivel de atención del individuo. Se puede detectar en condiciones normales (sueño, cansancio, aburrimiento) y en condiciones patológicas (de naturaleza orgánica o funcional, neurótica o psicótica). En los daños frontales la hipoprosexia se acompaña a trastornos de la personalidad, apatía, escasa iniciativa motora. Se puede detectar también en el Trastorno por Déficit de Atención con Hiperactividad y se acompaña a distracción, impulsividad e hiperactividad con consecuencias escolares y de adaptación en diferentes contextos. Hiperprosexia (hiperactividad de la atención). Se trata de una hipervigilancia o mayor atención del individuo. Se puede detectar en condiciones normales (por ejemplo en situaciones de peligro real) y en condiciones psicopatológicas.

6. El efecto Stroop, En 1886, J.M. Cattell comprueba que el tiempo que se tarda en leer palabras es mucho menor que el necesario para reconocer simples colores. Diversas investigaciones sobre este fenómeno condujeron a lo que posteriormente se ha denominado efecto Stroop (Stroop, 1935) y a la creación de una de las pruebas más utilizadas en el ámbito escolar y neuropsicológico. El efecto Stroop, originalmente descrito por su descubridor, John R. Stroop, en 1935, se refiere a la interferencia que se produce en el sujeto cuando realiza una prueba en la que debe indicar el color de la tinta con la que está escrita una palabra, que no coincide con su significado (Stroop-PC). Esta prueba precisa la ejecución en un proceso controlado de una tarea novedosa, mientras se debe impedir la intrusión de un proceso automático. El test de Stroop es un test atencional que se encarga de evaluar la habilidad para resistir la interferencia de tipo verbal por lo que es una buena medida de la atención selectiva. En términos básicos, evalúa la capacidad para clasificar información del entorno y reaccionar selectivamente a esa información. Entre las características del test encontramos: • Es de aplicación individual. • Duración 5 minutos. • Edad de aplicación: entre 7-70 años. • Detección de problemas neurológicos y cerebrales y medida de la interferencia. • Sensible a la perseverancia perceptiva ya que exige al evaluado que suprima respuestas automáticas a favor de una respuesta específica solicitada por el evaluador. • Medida de la atención selectiva y en segundo término de la velocidad de procesamiento.