Litrugia

1. Sacramentum concilium o misterio Consejo (CVII)

1.1. Papa Pablo VI el 4 de diciembre de 1963.

1.2. Altiora Principia o los principios fundamentales

1.2.1. 1. La liturgia es el ejercicio del sacerdocio de Cristo (7): 2. La liturgia es cumbre y fuente de la vida cristiana: 3. Participación plena consciente y activa: 4. Manifestación de la Iglesia (26): 5. Unidad sustancial, no rígida uniformidad (37-39): 6. Sana tradición y legítimo progreso (23):

2. Mediator Dei o el mediador de Dios

2.1. Papa Pío XII el 20 de noviembre de 1947

2.2. Fue la primera encíclica dedicada por completo a la liturgia.

2.3. calificado como “paso del espíritu por la Iglesia”.

2.4. Mediator Dei (1947): «La sagrada liturgia es el culto público que nuestro Redentor tributa al Padre como Cabeza de la Iglesia, y el que la sociedad de los fieles tributa a su fundador, y por medio de él, al eterno Padre: es, diciendo brevemente, el completo culto del Cuerpo místico de Jesucristo, es decir, de la cabeza y de sus miembros» (MD 29). La definición se sitúa en una perspectiva cúltico-sacramental. Partiendo del culto y de la misión sacerdotal de Jesucristo presenta la liturgia como culto de la Iglesia, en un sentido comunional, sin dejar de acentuar el nivel jerárquico. La Mediator Dei relaciona el poder sacerdotal jerárquico con el poder sacerdotal del pueblo de Dios. Para la encíclica el sacerdocio de Jesucristo es actualizado en el culto histórico de la Iglesia, lo que conlleva la presencia de éste en la liturgia y la naturaleza sacramental del culto litúrgico. Jesucristo, en definitiva, instituyó la liturgia como fuente de santificación, y nosotros al celebrarla nos santificamos, dando gloria a Dios.

3. actuosa participatio o La participación activa

3.1. El papa san Pio X será quien acuñe este concepto en su Motu Proprio Tra le sollecitudini (1903).

3.2. Consecuencia de la reforma conciliar es la revisión que se ha hecho de los libros litúrgicos para llevar al pueblo a la liturgia y favorecer la participación activa. La obra salvífica realizada por Cristo durante su vida terrena, continúa actualizándose ahora en la liturgia, mediante el ejercicio de su acción mediadora y sacerdotal. De ahí que, participar en la liturgia suponga asociarse a esta acción sacerdotal de Cristo.

3.3. Esta participación tiene 3 notas: a. Consciente: descubrir y vivir, guiados por la fe, lo que acontece en las acciones litúrgicas. b. Piadosa: en la celebración los fieles están en actitud de comunicación con Dios c. Activa: lleva a los fieles a participar en el diálogo, canto, oración y escuchar la Palabra de Dios y recibir sacramentalmente el Cuerpo del Señor, aunque no comulgar sacramentalmente no excluye la participación activa.

3.4. Esta participación, además, exige: 1. Comprender: el significado de los signos litúrgicos. 2. Intervenir: en el desarrollo de las acciones litúrgicas. 3. Concordar: las actitudes externas e internas. En palabras de Pio XII “concuerde el alma con la voz”. 4. Sintonizar: los propios sentimientos con los de Cristo uniendo nuestra acción de gracias, adoración, petición, a la suya. 5. Prolongar: en la vida lo experimentado en el rito, convirtiendo la vida en una acción cultual. 6. Conectar: la vida ordinaria con la liturgia para que todas las actividades eclesiales estén ligadas a la liturgia, así como orientadas hacia ella.

4. Definición Liturgia

4.1. Se considera la Liturgia como el ejercicio del sacerdocio de Jesucristo. En ella los signos sensibles significan y realizan la santificación del hombre, y así el Cuerpo Místico de Jesucristo, la Cabeza y sus miembros, ejerce el culto público íntegro. En consecuencia, toda celebración litúrgica, por ser obra de Cristo sacerdote y de su Cuerpo, que es la Iglesia, es acción sagrada por excelencia, cuya eficacia no la iguala ninguna otra acción de la Iglesia (SC 7).

4.2. Podemos esbozar los aspectos teológicos de esta noción en los siguientes puntos: a) La liturgia es obra del Cristo total, de Cristo primariamente, y de la Iglesia por asociación. b) La liturgia tiene como finalidad la santificación de los hombres y el culto al Padre. c) La liturgia pertenece a todo el Pueblo de Dios, que en virtud del bautismo es sacerdocio real con el derecho y el deber de participar en las acciones litúrgicas. d) La liturgia está constituida por gestos y palabras (ritu et preces) que significan y realizan eficazmente la salvación. e) La liturgia configura y determina el tiempo de la Iglesia desde el punto de vista escatológico. f) La liturgia es fuente y cumbre de la vida de la Iglesia.