1. 1. Un concepto filosófico-crítico de humanidad para las ciencias
1.1. El ámbito de la ética empresarial como ética aplicada es la de trabajar junto con los agentes protagonistas de la práctica empresarial, la ciudadanía, los expertos en la actividad y los gobiernos (Cortina, 2003) para centrar esta tarea en el ámbito práctico, en el ámbito de la actuación humana y sus instituciones.
1.2. Argumenta que a través de la disciplina de ética empresarial es posible avanzar en la responsabilidad social que tienen las universidades de formar a profesionales en capacidades científicas y epistemológicas de mostrarles prácticas, cognitivas de afiliación, de relación con otros seres humanos y con la naturaleza, así como de educarles en la virtud dialógica.
1.3. Por tanto, se argumenta la importancia que tiene en la formación universitaria de los profesionales la educación tanto en conocimientos como en intereses, razón y emoción, aspectos que ha desarrollado la ética empresarial ya desde sus inicios sobre la década de los setenta del pasado siglo.
2. 2. La ética empresarial como ética aplicada
2.1. Se puede establecer que la ética aplicada, como disciplina, no ofrece de inmediato las respuestas tipo a los problemas tipo, porque esto sería, sin duda alguna, de poca ayuda para los profesionales.
2.2. La denominación de «ética aplicada» sea una elección desafortunada, pues en verdad sugiere que su esencia reside en el contraste con la ética pura y que lo que es aplicado es una teoría pura o teoría ética sistemática.
2.3. Esta separación de teoría y práctica que se sugiere desde su nomenclatura ha dado lugar a buena parte del estudio de la ética aplicada a saber, los modelos de aplicación o el sentido de la adecuación, la tarea de la ética aplicada y las características propias de las praxis en las que se fija, el papel del «experto» ético, los niveles de aplicación y su relación con otras disciplinas.
2.4. La demanda de tales reflexiones proviene, mayoritariamente, de los propios protagonistas de las distintas praxis o distintas esferas de poder que exigen reflexión y orientaciones éticas.
2.5. Siguiendo a Cortina, que las éticas aplicadas son poliárquicas porque están siendo reclamadas no solo por los filósofos morales, sino también por los gobiernos nacionales e internacionales, por los expertos o profesionales de distintas actividades y por la opinión pública. Podríamos decir que esta poliarquía, junto con los métodos que proponen para su desarrollo, configura los rasgos más novedosos del pensamiento de las éticas aplicadas y que un profesional de la empresa y de las organizaciones debería saber reconocer.
3. 6. Profesionales que combinan interés, razón y emoción
3.1. Ha de ser formado para que sea capaz de comprometerse con la promoción de los valores posconvencionales porque es responsabilidad de todo sujeto como ciudadano:
3.1.1. a) Exigir y construir modelos sociales y pautas de vida que respondan al mínimo establecido por una ética cívica transnacional
3.1.2. b) Reclamar y apelar a las instituciones políticas para que promuevan la capacitación de los ciudadanos para llevar una buena vida humana.
3.1.3. c) Denunciar aquellas situaciones en las que determinadas instituciones (políticas,económicas y sociales) violan la promoción de tal capacitación y, por tanto, coartan al mismo tiempo el alcance de la justicia social.
3.2. Como ciudadano debe cumplir con las siguientes directrices
3.2.1. 1. Mostrar en todo momento y en cualquier enseñanza que existe una realidad social y física que nos rodea y el sujeto elige entre diferentes posibilidades y justifica aquella por la que ha optado.
3.2.2. 2. Ayudar al estudiante a que se sienta parte de un proyecto con el que se identifica porque ha sido capaz de elegirlo entre distintas posibilidades.
3.2.3. 3. Ofrecer al estudiante un modelo de ciudadanía que muestre que ya existen proyectos compartidos valiosos que vale la pena desarrollar y que se inspiran en una idea de justicia compartida y en el respeto activo de modelos concretos de felicidad.
3.3. Educacion
3.3.1. Desde la educación es donde se puede educar inteligentemente el deseo y desiderativamente la inteligencia.
3.3.1.1. permite la comprensión, el aprendizaje de tradiciones y de cosmovisiones.
3.3.2. La educación es educación moral y el proceso mediante el cual se le ofrecen al sujeto orientaciones capaces de generar libertad.
3.3.2.1. se le capacita para que ejerza su propia autonomía
3.3.3. La formación científica y profesional universitaria debería estar conectada con los proyectos que los seres humanos han tomado como propios porque humanizan pues estos los ayuda a ser ciudadanos y sociedades más justos, más responsables y mejores.
4. 5. La formación desde una ética empresarial integrativa
4.1. Aspectos que epistemológicamente deberían ser trabajados con los futuros profesionales:
4.1.1. 1) Aspectos que epistemológicamente
4.1.1.1. No es posible entender ninguna actividad o relación humana exenta de valores, normas y principios morales.
4.1.2. 2) La propuesta de un horizonte ético-crítico
4.1.2.1. -Poder interpretar los valores, las normas y los procedimientos de la práctica concreta.
4.1.2.2. -Permite diferenciar entre vigencia social y validez moral.
4.1.3. 3) El reconocimiento de los tres tipos de racionalidad presentes en la praxis humana
4.1.3.1. - teleológica, estratégica y comunicativa.
4.1.3.2. - racionalidad comunicativa tiene el valor de interpretar las razones de carácter teleológico y estratégico 3
4.1.4. 4) La exigencia de la participación de todos los afectados presentes y futuros
4.1.4.1. Considerándolos interlocutores válidos en la praxis humana.
4.1.4.2. Se conservan las ideas universales deontológicas de la dignidad humana, de la libertad y de las oportunidades de vida equitativa para todos.
4.1.4.3. se busca el consenso de todos los afectados para protegerlos.
4.1.5. 5) El horizonte ético-normativo
4.1.5.1. Es la búsqueda de comunicación y el logro del consenso racional entre las personas
4.2. Formar a los profesionales para diseñar las mejores organizaciones (política, estructura y cultura) para que así tomen las mejores decisiones.
4.3. Según Adela Cortina cabría entrenarse y formarse en
4.3.1. 1) Determinar el fin específico o bien interno de cada práctica, por el que esta cobra su legitimidad social.
4.3.2. 2) Averiguar cuáles son los medios adecuados para producir tal bien y qué valores es preciso incorporar para alcanzarlos.
4.3.3. 3) Indagar los hábitos que han de ir adquiriendo la organización en su conjunto y los miembros que la componen para incorporar esos valores e ir forjándose un carácter que les permita deliberar y tomar decisiones acertadas en relación con la meta
4.3.4. 4) Discernir qué relación debe existir con las distintas prácticas e instituciones.
4.3.5. 5) Dilucidar qué relación debe existir entre los bienes internos y externos de la empresa.
4.3.6. 6) Conocer, respetar y promover los valores de la moral cívica y los derechos que esa sociedad reconoce a las personas y en la que la empresa se inscribe.
5. 3. Un breve recorrido por la ética empresarial
5.1. 1970 en Estados Unidos y de 1980 en Europa
5.1.1. La ética empresarial se ha presentado como una disciplina de la ética aplicada.
5.1.1.1. Ha hecho suya la tarea que la ética aplicada posee, que no es otra que la de aportar una reflexión y una orientación ética a la praxis
5.1.1.1.1. No hay unanimidad, dado que existen distintas propuestas metodológicas para el desarrollo de una ética empresarial como ética aplicada.
5.1.2. Comenzara a desarrollarse el pensamiento de la ética empresarial.
5.1.2.1. En el caso de la ética empresarial, destacan la sociedad y los actores empresariales.
5.1.3. Todo apuntaba que esta disciplina no tendría un amplio recorrido. «la ética empresarial es una moda».
5.1.3.1. Del ámbito Moral no podemos huir y que no podemos negar, el de las personas y de las instituciones que incluye intereses, razones y emociones.
5.1.3.1.1. Como consecuencia se crearon dos presiones:
5.2. Se puede decir que la ética empresarial se construyó a la sombra de las primeras páginas, palabras e imágenes de los medios de comunicación, expusieron las malas prácticas empresariales, tanto hacia fuera de la empresa. Contaminación atmosférica, acuífera y acústica, sobornos y publicidad abusiva o discriminatoria, acoso moral, discriminación salarial por cuestión de género y precios abusivos.
5.2.1. El objetivo: decirle a la empresa que debe enmarcar su actividad empresarial en el seguimiento no solo de las reglas del mercado y del derecho, sino también de la conciencia moral crítica que ha alcanzado su sociedad.
5.2.1.1. Que permita juzgar los aciertos y limitaciones de cualquier actividad desarrollada en el seno de las organizaciones empresariales o instituciones sociales.
6. 4. Diferentes modos de entender la ética empresarial
6.1. El reto más importantes a los que se enfrenta cualquier ética aplicada
6.1.1. Desarrollar un método propio para ser capaz de alcanzar los objetivos y funciones que le corresponden.
6.2. Es esencial mostrar las diferentes formas de entender la «aplicación» en ética empresarial.
6.2.1. Los 3 sentidos: correctivo, funcional y integrativo
6.2.1.1. Es relevante argumentar y potenciar el desarrollo de las competencias mostrando en todo momento las implicaciones que tendría el primero para la concepción y dirección de la empresa.
6.2.2. Razón para adoptar este método
6.2.2.1. Se trata de un modelo que no se conforma con delimitar o describir la praxis humana, ni tampoco con una aplicación «pura» de la racionalidad de cada ámbito de la ética.
6.2.2.2. Posee concepción más amplia de la racionalidad de los diferentes ámbitos de acción del ser humano desde principios ético-normativos.
6.2.2.2.1. Ambas propuestas de la ética aplicada consideran que existe una interdependencia entre los juicios morales particulares y las teorías normativas
6.3. La ética aplicada «integrativa» de carácter interdisciplinar que, partiendo de una «racionalidad comunicativa», está controlada en sus deficiencias prácticas
6.3.1. Dentro de ese marco ontológico, se debe propiciar una deliberación acerca de los fines, los medios y los modelos de excelencia, y valorar las consecuencias previsibles para las actuales generaciones y para las futuras.
6.4. Las propuestas más desarrolladas dentro de este marco general de ética aplicada integrativa han sido desarrolladas por K.O. Apel, P. Ulrich y J. Conill
6.4.1. Todas estas propuestas comparten los postulados básicos de la ética discursiva, consideran siempre el tratamiento de cualquier praxis humana.
6.4.1.1. La existencia de tres tipos de racionalidad: la comunicativa, la teleológica y la estratégica.
6.4.2. Ofrecen un marco ético desde el que reflexionar y explicitar las normas, valores y procedimientos válidos de la práctica concreta.