1. MODALIDADES Y TIPOS
1.1. Tradicionalmente se señalan tres momentos de evaluación: inicial, de proceso y final.
1.1.1. La evaluación diagnóstica se realiza de manera previa al desarrollo de un proceso educativo, cualquiera que sea, con la intención de explorar los conocimientos que ya poseen los alumnos.
1.1.1.1. Es considerado por muchos teóricos como parte de la evaluación formativa, dado que su objetivo es establecer una línea base de aprendizajes comunes
1.1.2. La evaluación formativa se realiza para valorar el avance en los aprendizajes y mejorar la enseñanza y el aprendizaje.
1.1.2.1. Su función es mejorar una intervención en un momento determinado y, en concreto, permite valorar si la planificación se está realizando de acuerdo con lo planeado
1.1.2.2. Las modalidades de evaluación formativa que se emplean para regular el proceso de enseñanza y de aprendizaje son: interactiva, retroactiva y proactiva.
1.1.3. La evaluación sumativa promueve que se obtenga un juicio global del grado de avance en el logro de los aprendizajes esperados de cada alumno, al concluir una secuencia didáctica o una situación didáctica.
1.1.3.1. Se basa en la recolección de información acerca de los resultados de los alumnos, así como de los procesos, las estrategias y las actividades que ha utilizado el docente y le han permitido llegar a dichos resultados.
2. ELEMENTOS
2.1. Cuando se evalúa desde el enfoque formativo, se debe tener presente una serie de elementos para el diseño, el desarrollo y la reflexión del proceso evaluativo.
2.1.1. ¿Qué se evalúa?
2.1.2. ¿Para qué se evalúa?
2.1.3. ¿Quiénes evalúan?
2.1.4. ¿Cuándo se evalúa?
2.1.5. ¿Cómo se emiten juicios?
2.1.6. ¿Qué se hace con los resultados de la evaluación?
2.1.7. ¿Cómo se distribuyen las responsabilidades de la evaluación?