El sistema educativo debe ser el eje central de la reintegración, reparación integral y restituci...

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El sistema educativo debe ser el eje central de la reintegración, reparación integral y restitución de derechos de los niños, niñas y adolescentes reinsertados del conflicto armado colombiano, a través de la Implementación de estrategias incluyentes sobre reconciliación. by Mind Map: El sistema educativo debe ser el eje central de la reintegración, reparación integral y restitución de derechos de los niños, niñas y adolescentes reinsertados del conflicto armado colombiano, a través de la Implementación de  estrategias incluyentes sobre reconciliación.

1. Argumento Retorico

1.1. Fui a nacer donde no hay nada tras esa línea que separa el bien del mal mi tierra se llama miseria y no conozco la palabra libertad Fui secuestrado en una guerra torturado y preparado pa matar me han convertido en una bestia soy solo un niño que no tiene identidad Me han obligado a disparar me han ensenado como asesinar me han obligado a mutilar en un infierno terrenal Eh no, tu indiferencia no tiene perdón quien te robo el corazón ? no te levantes del sillón eh no, tu indiferencia no tiene perdón quien te robo el corazón ? apaga la televisión Una pistola en mi cabeza me esta obligando a asesinar a mi papa soy una maquina de guerra mi dedo aprieta ese gatillo sin mirar Me han obligado a disparar me han ensenado como asesinar me han obligado a mutilar en un infierno terrenal Eh no, tu indiferencia no tiene perdón quien te robo el corazón ? no te levantes del sillón eh no, tu indiferencia no tiene perdón quien te robo el corazón ? apaga la televisión.

1.1.1. Ska-P (2002) Niño Soldado. Album: Que Corra la Voz. Genero Pop. (Medio de Reproducion: https://youtu.be/tkKSnkCv_HM) Lugar: Vallecas, Madrid, España

2. Argumentos de Datos

2.1. Según el Tribunal Internacional sobre la Infancia afectada por la Guerra y la Pobreza, entre 14 mil y 17 mil menores hacen parte de las filas de los grupos armados ilegales en Colombia, entre guerrillas y bandas criminales. (parr. 1) Según las cifras que maneja el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, desde 1999 hasta febrero de 2015 su programa de atención especializada para niños, niñas y adolescentes desvinculados de los grupos armados ilegales ha atendido a 5.730 menores(parr. 2)

2.1.1. Redacción Colombia 2020(2016, Junio, 8) Las cifras sobre los niños y la guerra. El Espectador. Recuperado de: http://colombia2020.elespectador.com/pais/las-cifras-sobre-los-ninos-y-la-guerra

2.2. Programa de Atención Especializado a Niños, Niñas y Adolescentes que se desvinculan de los Grupos Armados Organizados al Margen de la Ley (GAOML) Análisis de tendencias de los niños, niñas y adolescentes que ingresaron al Programa en el primer trimestre 2014 (enero-marzo 2014) A lo largo del primer trimestre del año 2014, se observa que el mayor número de niños, niñas y adolescentes desvinculados que ingresaron al Programa Especializado, procedían en su gran mayoría de las FARC con el 73,61%, seguido del ELN con el 19,44% y finalmente las BACRIM con la participación del 5,6%. (pag. 5)

2.2.1. Instituto Colombiano de Bienestar Familiar. (2014, Junio) Observatorio del bienestar de la niñez . Recuperado de http://www.icbf.gov.co/portal/page/portal/PortalICBF/RecursosMultimedia/PublicacionesObservatorio/3_boletin_tendencias_2014.pdf

2.3. Un total de 2.184.334 de niños (1.061.418 niñas y 1.122.916 niños) han sido desplazados en Colombia. Sólo entre enero y mayo de 2015, 1.374 niñas y niños han sido desplazados de su hogar por cuenta del conflicto armado. El 33.55% se encuentra entre los 0 y 6 años de edad, mientras que el 41.76% entre los 7 y 12. Los departamentos que registran mayor nivel de desplazamiento de niñas, niños y adolescentes son el Valle del Cauca, Antioquia, Cauca y Chocó27. Al respecto, en el Auto 251 de 2008 la Alta Corte señala que: (i) Los niños, niñas y adolescentes en situación de desplazamiento son las víctimas más débiles y vulnerables de la población desplazada. (ii) La política pública sobre desplazamiento forzado carece de un enfoque integral y de atención diferencial a los niños, niñas y adolescentes. (iii) Los niños y las niñas han sido invisibles a la respuesta del Estado. También menciona los riesgos específicos para las niñas, niños y adolescentes que son causa y consecuencia del desplazamiento: reclutamiento forzado, minas antipersonales, violencia sexual, crímenes individuales contra su integridad, incorporación a los comercios ilícitos y acciones delictivas de control social por parte de los grupos armados no estatales. (pag. 19)

2.3.1. Fundación Plan (2015, Septiembre) NIÑAS Y NIÑOS: Determinantes en la Construcción de la Paz Territorial, Estable y Duradera. Recuperado: https://plan.org.co/sites/files/plan/field/field_document/documento_paz_final.pdf

3. Argumento de Caso

3.1. Martín, la historia de un niño desmovilizado que venció a la guerra Hijo de la guerra Nació en la guerra. No llegó a ella, nació adentro de ella, la recibió como una herencia desde su nacimiento: ese 30 de enero de 1991 el parto fue atendido por una comadrona de esa remota vereda de Toribío, la única comadrona de esa vereda que no tenía, ni tiene, acueducto, ni energía eléctrica, ni mucho menos una escuela cercana o un hospital; de esa vereda en la que vivían 50 familias dedicadas al cultivo de amapola; de esa vereda que era un territorio de guerrilleros que impartían orden, hacían justicia y, de cuando en cuando, llenaban las alacenas de las cocinas de cada familia con arroz o lentejas o sal o carne. En esa vereda nació Martín. La amapola la conoció desde siempre, así como ese método para sacar de ella el líquido viscoso que era vendido a los guerrilleros y que se convertía en heroína. Desde que pudo caminar iba con los hombres de la vereda hasta los cultivos y arrancaba los tallos para luego cocinarlos y sacar el producto que vendían a los guerrilleros. A ellos también los conoció desde siempre, a ellos y a sus armas. Llegaban hasta la puerta de cada casa, pagaban por la amapola procesada, hablaban con todos, a los niños les enseñaban sus armas y les permitían disparar. Si decidían permanecer en la casa, se les disponía el cuarto más grande para que durmieran con su mujer de turno. El resto de la familia dormía en uno de los otros cuartos. En términos prácticos, lo dice el mismo Martín, fue colaborador de la guerrilla desde que aprendió a caminar. Luego de que pudo ir solo desde su casa hasta el pueblo, los comandantes de la Columna Móvil Jacobo Arenas le pedían que comprara un par de pilas, o algo de sal, o unas latas de gaseosa para ellos. A sus nueve años le fue entregado un radio de comunicaciones y se le encomendó informar desde el pueblo todos los movimientos de los soldados. Dos años después, en el 2002, le entregaron unas ropas de soldado y un fusil. Desde ese día —tenía once años— hizo parte de las filas armadas de la Jacobo Arenas. Entre el 2002 y el 2006 los años de su vida se deslizaron turbulentos. Enumera cada uno de los acontecimientos que conserva en su memoria como pesadillas: los enfrentamientos, disparar, correr, ver a otros como él, menores que él, morir. Un día, luego de un encuentro con un grupo de militares, uno de los niños resultó herido. El chico no toleró el dolor y se disparó a sí mismo con el cañón de la pistola en la boca. Sin embargo, el recuerdo más profundo y oscuro para él es la toma de Toribío en el 2005. Fue planeada con dos años de anticipación. Todos recibieron una instrucción precisa: algunos aprendieron cuidados médicos básicos, otros fueron destinados a los radios y otros, entre los que estaba él, debían disparar. Martín cuenta que durante los cerca de cinco días que duró la toma, corrió desde Toribío hasta el campamento día y noche para recargar cartuchos y llevar a sus compañeros heridos. Sobre todo eso. Al final, su verdadero trabajo fue llevar al campamento a sus compañeros moribundos. Vio de nuevo morir a los otros niños que habían vivido con él y, en medio de esas muertes, tuvo la convicción de que abajo, en el pueblo, otras personas lloraban como él a otros muertos. Cuando el ataque terminó, lloró. Lloró inmensamente su drama secreto y remoto y abismal de ser un niño del conflicto. La guerra se había desplomado sobre él con todas sus imágenes implacables y todo el miedo a la muerte que podría soportar un hombre. Luego renunció. Un día fue enviado por unos medicamentos a Cali, pero nunca regresó. Fue hasta una oficina del ICBF y dijo que era un guerrillero y quería dejar de serlo. Lo dijo de ese modo, simple e infantil, como un ruego

3.1.1. Ospina, Y. (2014 Marzo 17) Martín, la historia de un niño desmovilizado que venció a la guerra. El pais.com Recuperado de: http://www.elpais.com.co/judicial/martin-la-historia-de-un-nino-desmovilizado-que-vencio-a-la-guerra.html

4. Argumentos de Autor

4.1. (…) se propone como punto de partida dentro de una estrategia educativa para la paz, la implementación del aprendizaje social y emocional. El propósito con esta estrategia de aprendizaje es que las personas aprendan a gestionar sus emociones básicas y universales, nos convierta en personas competentes en nuestros entornos social, académico y laboral, nos proporciona herramientas para afrontar los conflictos y situaciones adversas, nos acentúa la empatía y la comprensión por los demás y en último término, favorece que construyamos un mundo justo, pacífico, productivo y sostenible. (parr. 59-60)

4.1.1. Pérez, F. (Semana del 27 de Mayo al 2 de Junio de 2016) El papel de la educación en el posconflicto. Recuperado de: http://viva.org.co/cajavirtual/svc0496/pdfs/Anexo_1.pdf

4.2. (…) trabajar en el fortalecimiento institucional y en la movilización ciudadana. El ciudadano no puede caer en la pasividad y dejar solo al Estado, ni el Estado puede abandonar al ciudadano a su suerte. El proceso de paz necesita que muchas personas se sumen oportunamente. Puede darse la trágica situación donde cuando A quiere hacer la paz, B no quiere y cuando B quiere hacer la paz, A o C no lo quieren. La solución de conflictos armados internos se convierte en un campo de investigación con capacidad de acumular experiencias y conocimientos. Tal vez casi todos tengamos razones para haber sido alguna vez violentos. (pag. 575)

4.2.1. Mockus Sivickas, A. (abril de 2014) Reparación y Postconflicto: "En surcos de cultura, la paz germina ya" Formación ciudadana y cultura de la paz. (Ed.) Editorial Universidad del Rosario. (Capítulo 7. Pág. 557 a 580)Bogotá D.C.

4.3. La creación de un sólido sistema educativo como parte de la recuperación posconflicto. (…) la educación desempeña un papel muy importante. El acceso a la educación es una herramienta muy importante no solo para la protección de los niños, sino también para la comunidad en general. La educación suministra protección física, psicológica y cognitiva. El desarrollo a largo plazo y la paz duradera dependen de los recursos humanos y de la comunidad del país que haya atravesado un conflicto armado. La educación puede ayudar a reducir polarizaciones económicas, sociales y étnicas; promover el crecimiento y el desarrollo equitativo, y construir una cultura de diálogo en vez de una de violencia. (pag. 226-228)

4.3.1. Infante Márquez, A. (2014) El papel de la educación en situaciones de posconflicto: estrategias y recomendaciones. Recuperado de: http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=413834074013