1. Escucha Activa
1.1. La escucha activa es la habilidad para captar adecuadamente y en su totalidad el mensaje de la otra persona. Mediante esta habilidad, se llega a ser consciente de lo que la otra persona está diciendo y de lo que está intentando comunicar. A través de la escucha activa, se da información al interlocutor de que se está recibiendo lo que éste dice.
1.1.1. ¿Cómo poner en marcha una escucha activa? - Observando al interlocutor - Identificar el contenido de sus expresiones verbales. - Identificar sus sentimientos. - Identificar el momento en el que el interlocutor desea que el oyente hable. - Sentir empatía.
2. Retroalimentación
2.1. La retroalimentación es un recurso que permite comprobar el estado del proceso de comunicación, si se está llevando a cabo correctamente o si, por el contrario, se ha desvirtuado. Su finalidad es comprobar si el interlocutor ha comprendido o no el mensaje
2.1.1. ¿Cómo se comprueba? - Planteando cuestiones. - Repitiendo el mensaje. - Expresando acuerdo/desacuerdo. - A través de la persistencia en el mismo tema. - Respuestas con empatía.
3. Empatía
3.1. La empatía es la capacidad de recibir y comprender las vivencias de otras personas, especialmente los estados de ánimo. Es decir, una persona empática es capaz de ponerse en el lugar del otro.
3.1.1. Formas de expresar empatia - Prestar atención a lo que la otra persona está contando, mostrando interés. - No interrumpir al emisor mientras habla. - Antes de dar una opinión sobre el tema, hay que esperar a tener información suficiente y asegurarse de que se ha escuchado e interpretado correctamente lo esencial del mensaje.
4. Asertividad
4.1. La asertividad es una habilidad personal que permite expresar los sentimientos, deseos, opiniones y pensamientos en el momento oportuno, de la forma adecuada y sin negar ni desconsiderar los derechos de los demás. Es una manera de llegar a conseguir los objetivos propuestos, sin sentirse incómodo ni incomodar a los demás.
4.1.1. Características - Una persona asertiva se manifiesta libremente; no tiene dificultad para hablar de sí misma y a través de sus actos expresa lo que es, lo que piensa, lo que siente y lo que quiere. - Se comunica de manera directa, franca y adecuada con los demás. - No espera a que las cosas “pasen”, sino que se mueve activamente hacia lo que quiere.