Martín Lutero
por Lee Dia
1. En octubre de 1517, Lutero planeó un debate sobre la práctica de vender indulgencias. Como nadie participó en la discusión, decidió enviar sus tesis directamente al cardenal Alberto de Bandeburgo, elector y arzobispo de Maguncia.
2. Al mismo tiempo, se dice que clavó sus 95 tesis en la puerta de la Iglesia de Todos los Santos de Wittenberg, que en aquel momento servía como una especie de valla publicitaria.
3. Martín Lutero nació en el seno de una familia minera en 1483. En 1501 comenzó sus estudios en la Universidad de Erfurt. Cuatro años más tarde, completó su maestría y empezó a estudiar Derecho.
4. A partir de entonces construirá una renovada doctrina cristiana en varios escritos producidos casi todos en ese año 1520 y que se difunden en un amplio público, gracias al reciente invento de la imprenta por Gutemberg.
5. Por lo anterior, la forma de gobierno de la Edad Media es profundamente teocrática, una monarquía en términos religiosos, y es la iglesia católica, motivada por la obra de San Agustín Civitate Dei (Ciudad de Dios), la encargada de administrar los asuntos del Estado.
5.1. Lutero se aventuró solo una vez a ir más allá de la fronteras del Sacro Imperio Germánico y fue cuando hiso su peregrinaje a Roma de la que volvió con una gran cantidad de anécdotas antipapales (Roper, 2017, p.16). Esto porque fue allí donde el monje agustino se dio cuenta de los abusos de la iglesia frente a las indulgencias, anatas (pagos que se hacían a la Curia romana) y el aumento de la burocracia papal.
5.1.1. En este contexto, el Papa León X le otorgó la posibilidad a Alberto de Brandeburgo de vender una nueva indulgencia en su territorio, para la recolecta de fondos con los que se iban completar la construcción de la Basílica de San Pedro. Fue allí, en el año 1517, que el monje alemán publica las noventa y cinco tesis en las puertas de la catedral de Wittenberg, en donde denuncia a los predicadores de indulgencias. Así, por ejemplo, dice “¿Por qué el Papa, cuya fortuna es hoy más abundante que la de los más opulentos ricos, no construye tan sólo una basílica de San Pedro de su propio dinero, en lugar de hacerlo con el de los pobres creyentes?” (Lutero, Tesis 86).