1. El juicio a las juntas
1.1. No había muchos antecedentes de actos semejantes en el mundo, y mucho menos en América Latina, con militares tan afectos a los golpes de Estado. Después de la guerra de Malvinas y la llegada de la democracia, comenzó a cobrar fuerza la idea de un juicio a los militares que derrocaron el Gobierno Constitucional en marzo de 1976. Instalado el Presidente Raúl Alfonsín, el dictado de varias leyes permitió que ante la justicia de los civiles pudiera sentarse en el banquillo a los nueve comandantes que integraron las sucesivas juntas que gobernaron el país. Algunos de los oficiales de la alta graduación que enfrentaron el denominado “Juicio del Siglo” fueron:
1.1.1. El Teniente General Jorge R. Videla, como Comandante en Jefe del Ejército que integró la Junta Militar entre 1976 y 1982.
1.1.2. Almirante Emilio E. Massera como comandante en Jefe de la Armada que integró la Junta Militar entre 1976 y 1978.
1.1.3. Brigadier General Agosti como comandante en Jefe de la Fuerza Aérea
1.1.4. Teniente General Roberto Viola, como Comandante en Jefe del Ejército integró la Junta Militar 9 meses del año 1981.
1.1.5. Almirante Jorge Amaya como comandante en Jefe de la Armada integró la Junta Militar entre 1981 y 1982.
1.2. "El juicio de los dos demonios"
1.2.1. Es la concepción según la cual los actos de violencia y terrorismo perpetrados por las Fuerzas Armadas durante el terrorismo de Estado en Argentina en las décadas de 1970 y 1980 son de algún modo equiparables con los actos de violencia de las organizaciones guerrilleras, como Montoneros y el Ejército Revolucionario del Pueblo.
1.2.1.1. En 1989 Carlos Menem asume la presidencia, en los últimos meses de este año, Menem envía al parlamento las leyes de emergencia económica y de reforma del Estado que otorgan al poder ejecutivo poderes excepcionales para regir los destinos de la administración pública. Además, esta reforma autorizaba al presidente a proceder con la privatización de un gran número de empresas estatales y a la fusión y disolución de diversos entes públicos. Amparado en los preceptos del libre mercado, Menem lleva adelante una reforma estructural de la vida económica argentina que incluye la apertura irrestricta de los capitales financieros, la desregulación del comercio internacional y la venta compulsiva de gran parte del patrimonio del estado.