El Príncipe
von Cynthya Carranza

1. b
2. l
3. a
4. g
5. 1-3
5.1. Los Estados son los que a través del tiempo han ejercicio soberanía entre los hombres; siendo repúblicas o principados. En este apartado se habla de principados que, pueden ser hereditarios (antiguos), nuevos y con miembros agregados (mixtos). Cada uno de estos principados son concebidos por armas propias o ajenas; suerte o virtud.
5.2. Gobernar un principado heredado (antiguo) es mucho más fácil que gobernar bajo otro tipo de principado; pues, no es necesario sustituir leyes o generar mayores cambios. Basta con cumplir con lo que previamente se estableció y que funcionó a lo largo del tiempo. Sin embargo, aunque no se está exento del rechazo de los súbditos, es todavía menor que el rechazo de un nuevo gobernante.
5.3. El principado nuevo y el principado mixto están destinados al rechazo de sus súbditos que, al inicio buscaron sustituir a su anterior gobierno, pues, cuando experimentan nuevos cambios se dan cuenta que el nuevo principado no podrá satisfacer sus expectativas, no estando conformes con sus nuevas imposiciones; obligando al nuevo principado a mantener su gobierno de la misma forma en que fue adquirido: usando la fuerza.
6. 4-6
6.1. Los principados siempre han sido gobernados de dos formas distintas: Por un príncipe que elige sus siervos que, lo son todos los habitantes quienes le reconocen como único soberano. O por un príncipe asistido por nobles que, deben su cargo a su linaje y que tienen autoridad y sus propios súbditos en diferentes sectores.
6.2. Solo hay tres formas de conservar un Estado que, antes de ser adquirido, estaba acostumbrado a regirse por sus propias leyes y a vivir en libertad: primero, destruirlo; después radicarse en él; por último dejarlo regir por sus leyes, obligarlo a pagar un tributo y establecer un gobierno compuesto por un corto número de personas para que también se encargue de velar por la nueva conquista.
6.2.1. c