
1. La clásica regla de los cinco aciertos constituye la base práctica de una administración segura de los medicamentos. Los cinco aciertos aportan una guía práctica y sencilla que el profesional de enfermería podrá emplear durante la preparación, distribución y administración del fármaco, centrándose en su práctica individual. Los cinco aciertos son los siguientes: 1. Paciente correcto 2. Medicamento correcto 3. Dosis correcta 4. Vía de administración correcta 5. Momento de administración correcto
2. HISTORIA DE LA FARMACOLOGIA
2.1. Esta historia comenzó probablemente cuando un individuo empleó por primera vez una planta para aliviar los síntomas de una enfermedad. los babilonios registraron en tablillas de arcilla las primeras «recetas» que se conservan. los egipcios recogieron sus remedios en un documento conocido como el Papiro de Eber. el principal propósito de la farmacología es centrarse en el paciente y mejorar su calidad de vida.
3. CLASIFICACION FARMACOLOGICA Y TERAPEUTICA DE LOS FARMACOS
3.1. para organizar los fármacos es basarse en su utilidad terapéutica para el tratamiento de enfermedades específicas, lo que se conoce como clasificación terapéutica. La clasificación terapéutica no tiene por qué ser complicada. Por ejemplo, se puede clasificar un medicamento simplemente como un «fármaco para el accidente cerebrovascular» o un «fármaco para el shock»
4. NOMBRE QUIMICO GENERICO Y COMERCIAL
4.1. Un nombre químico se otorga empleando la nomenclatura establecida por la International Union of Pure and Applied Chemistry (IUPAC). Un fármaco tiene un único nombre químico que, en ocasiones, resulta útil para deducir las propiedades físicas y químicas de la sustancia. Por ejemplo, son pocos los enfermeros que conocen el nombre químico del diacepam: 7-cloro-1,3-dihidro-1- metil-5-fenil-2H-1,4-benzodiacepin-2-ona. Son contados los casos en que los enfermeros emplean el nombre químico; habitualmente, cuando el nombre es breve y fácil de recordar. Ejemplos de nombres químicos útiles son el carbonato de litio, el gluconato cálcico y el cloruro sódico.
4.1.1. El nombre genérico de un fármaco lo asigna el U.S. Adopted Name Council. Salvo raras excepciones, los nombres genéricos son más sencillos y fáciles de recordar que los nombres químicos. Muchas organizaciones, incluidas la Food and Drug Administration (FDA), la U.S. Pharmacopeia y la Organización Mundial de la Salud (OMS), se refieren a un medicamento por su nombre genérico. Debido a que existe un único nombre genérico para cada fármaco, los profesionales sanitarios emplean a menudo este nombre y los estudiantes suelen tener que memorizarlo.
4.1.1.1. El nombre comercial de un fármaco lo asigna el laboratorio que lo comercializa y suele preferirse que sea corto y fácil de recordar. El nombre comercial se conoce también como nombre registrado o patentado, término este último que sugiere propiedad. En EE. UU. el laboratorio que desarrolla el fármaco recibe los derechos exclusivos para ponerle nombre y comercializarlo durante 17 años tras presentar la solicitud de registro ante la FDA. Debido a que la autorización de un fármaco requiere varios años, el tiempo empleado en la autorización suele restarse de los 17 años. Por ejemplo, si son necesarios siete años para autorizar un fármaco, los laboratorios competidores no podrán comercializar un equivalente genérico durante otros 10 años. El objetivo es proporciona