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LO BELLO Y LO SUBLIME von Mind Map: LO BELLO Y LO SUBLIME

1. Kant ataca por primera vez el problema estético, y aunque sus ideas fundamentales acerca del arte y la belleza se hallan sistemáticamente expuestas en su obra posterior,tienen,cierto interés para el conocimiento de los orígenes de la estética kantiana.

2. Sobre la diferencia entre lo sublime y lo bello en la relación recíproca de ambos sexos.

2.1. Quien por primera vez aplicó a la mujer el nombre de bello sexo, acaso quiso decir algo galante, pero acertó mejor de lo que él mismo pudo imaginarse.

2.1.1. De otro lado, podríamos aspirar nosotros a la denominación de noble sexo si no se exigiese al carácter noble el apartamiento de títulos honoríficos y el concederlos mejor que el recibirlos.

2.2. Vanidad

2.2.1. La mujer tiene un sentimiento innato para todo lo bello, bonito y adornado. Ya en la infancia se complacen en componerse, y los adornos las hacen más agradables. Son limpias y muy delicadas para lo repugnante.

2.2.1.1. Gustan de bromas, y les distrae una conversación ligera, con tal de que sea alegre y risueña. Tienen muy pronto un carácter juicioso, saben adoptar aire fino y son dueñas de sí mismas; y eso a una edad en que nuestra juventud masculina bien educada es todavía indómita, basta y torpe.

2.2.1.1.1. En una palabra, representan, dentro de la naturaleza humana, el fundamento del contrasteentre las cualidades bellas y las nobles, y el sexo masculino se afina con su trato.

2.2.2. No desfigura en nada a una mujer ante los ojos del sexomasculino, contribuye, sin embargo, cuanto más visible es, a dividir entre sí al sexo bello.

2.2.2.1. Se juzgan entre sí muy duramente no bien una de ellas parece obscurecer los encantos de las demás, y, realmente, las que tienen grandes pretensiones de seducción son raras veces amigas entre sí en verdadero sentido.

2.2.3. A todos estos encantos amenaza finalmente la edad, devastadora de la belleza, y el orden natural de las cosas parece exigir que las cualidades sublimes y nobles reemplacen a las bellas, para que la persona vaya siendo digna de mayor respeto a medida que deja de ser amable.

2.3. En la vida conyugal

2.3.1. La pareja unida debe constituir como una sola persona moral, regida y animada por la inteligencia del hombre y el gusto de la mujer.

3. Los caracteres nacionales en cuanto descansan en la diferente sensibilidad para lo sublime y lo bello

3.1. Trata de

3.1.1. Entre los pueblos de nuestra parte del mundo, son, en mi opinión, los italianos y franceses los que más se distinguen de los demás por el sentimiento de lo bello, y los alemanes, ingleses y españoles, los que más sobresalen en el de lo sublime

3.1.1.1. Es serio, callado y veraz. Pocos comerciantes hay en el mundo más honrados que los españoles. Tiene un alma orgullosa y siente más los actos grandes que los bellos. Como su espíritu no encierra benevolencia bondadosa y dulce, resulta a menudo duro y aun cruel.

3.1.1.1.1. No puede decirse que el español sea más altivo o más enamorado que cualquiera de otro pueblo; pero lo es de una manera extravagante, que resulta rara y fuera de la habitual.

3.2. El aleman

3.2.1. Tendrá, pues, menos sentimiento que el francés con respecto a lo bello, y menos que el inglés para lo sublime; pero en los casos donde ambos han de aparecer unidos, su sensibilidad se siente más a gusto, y entonces evitará también felizmente los defectos a que arrastraría una violencia excesiva en cada una de estas clases de sentimientos.

3.2.1.1. En Alemania brilla aún bastante el ingenio a través de la hojarasca

3.3. El español

3.4. El Frances

3.4.1. Tiene una sensibilidad predominante para lo bello moral. Es amable, cortés y complaciente. Intima muy pronto, es aficionado a la broma, y su trato es fácil

3.4.1.1. Gusta de ser ingenioso y sacrificará sin remordimiento algo de la verdad a una ocurrencia.

3.4.1.1.1. Ya anciano, canta todavía el francés canciones alegres, y en lo posible es también galante con las damas.

3.5. El Ingles

3.5.1. Se mezclan la sensibilidad de un inglés y la de un francés, pero parece más cerca del primero

3.5.2. Muestra más complacencia en el trato que el primero, y si no se mueve en sociedad con tanta vivacidad o ingenio como el francés, se produce en ella con más modestia y juicio.

3.5.2.1. Se pregunta mucho más que los precedentes acerca de lo que puedan pensar de él los demás, y si hay algo en su carácter que pueda excitarle a desear una mejora importante, es esta debilidad, por la cual no se atreve a ser original, aun cuando tiene todas las condiciones para ello.

3.6. El Holandes

3.6.1. Es un carácter ordenado y diligente, y como sólo considera lo útil, tiene poca sensibilidad para lo que en un sentido más delicado es bello o sublime.

3.6.1.1. Un grande hombre significa para él lo mismo que un hombre rico; por amigo entiende su corresponsal, y le resulta fastidiosa una visita que no le produce nada.

3.6.1.1.1. Forma contraste, tanto con el francés como con el inglés, y es en cierto modo un alemán más flemático.

4. Primero habla sobre

4.1. Los diferentes objetos del sentimiento de lo sublime y de lo bello.

4.1.1. Los diferentes objetos del sentimiento de lo sublime y de lo bello.

4.2. Donde explica

4.2.1. Las diferentes sensaciones de contento o disgusto, no tanto sobre la condición de las cosas externas que las suscitan, como sobre la sensibilidad peculiar a cada hombre para ser grata e ingratamente impresionado por ellas. De ahí proviene que algunos sientan placer con lo que a otros produce asco; de ahí la enamorada pasión, que es a menudo para los demás un enigma, y la viva repugnancia sentida por éste hacia lo que para aquél deja por completo indiferente.

4.3. Por ejemplo

4.3.1. La noche es sublime, el día es bello. A lo primero denomino lo sublime terrorífico, a lo segundo lo noble, y a lo último lo magnífico. Una soledad profunda es sublime, pero de naturaleza terrorífica .

5. Las propiedades de lo sublime y de lo bello en el hombre en general.

5.1. Nos dice que

5.1.1. La inteligencia es sublime; el ingenio, bello; la audacia es grande y sublime; la astucia es pequeña, pero bella

5.1.1.1. Es un fundamento de la participación en su desdicha, pero también de la justicia, y, según la prescripción de ésta, renuncia al acta en el caso presente.

5.1.1.2. La solicitud desinteresada es noble. La cortesía y la finura son bellas. Las cualidades sublimes infunden respeto; las bellas, amor.

5.1.1.2.1. La solicitud desinteresada es noble. La

5.2. Donde

5.2.1. Aquellos en quienes se dan unidos ambos sentimientos, hallarán que la emoción de lo sublime es más poderosa que la de lo bello.

5.2.1.1. El amor es en ella melancólico, delicado y lleno de respeto; la desdicha de los demás despierta en el espectador sentimientos compasivos y hace latir su corazón con desdichas extrañas.

5.2.1.2. La comedía, en cambio, presenta sutiles intrigas, confusiones asombrosas, gentes despiertas que saben salir de apuro, tontos que se dejan engañar, bromas y caracteres ridículos. El amor no es aquí tan triste, sino alegre y confiado. Lo mismo que en otros casos, sin embargo, puede en este hacerse compatible hasta cierto grado lo noble con lo bello.

5.3. En las cualidades morales

5.3.1. Sólo la verdadera virtud es sublime

5.3.1.1. Algo de lo sublime, y el ánimo, con este sentimiento, cae en el ensueño y en el éxtasis; en la segunda manera, es alegra y sonriente. A los italianos parece convenir más el primer género del sentimiento de lo bello.

5.3.2. Existen algunas, sin embargo, que son amables y bellas, y en cuanto armonizan con la virtud pueden ser consideradas como nobles, aunque no deba incluírselas en la intención virtuosa.

5.3.2.1. No puede denominarse virtuoso el estado de ánimo del cual se originan actos que también la virtud inspiraría, porque los motivos que inspiran tales actos, aunque casualmente coinciden con la virtud, pueden entrar a menudo en conflicto con las reglas generales de la virtud.

5.3.3. La benevolencia

5.3.3.1. Pero ocurre que al ser exaltado este sentimiento a una debida generalidad, si bien se hace sublime, resulta, en cambio, más frío. No es posible que nuestro pecho se interese delicadamente por todo hombre, ni que toda pena extraña despierte nuestra compasión.

5.3.3.1.1. El segundo género del sentimiento bondadoso, ciertamente bello y amable, pero que no sirve de base suficiente a una verdadera virtud, es la cortesía.

5.3.3.1.2. Un íntimo sentimiento de la belleza y la dignidad de la naturaleza humana, y un ánimo seguro y vigoroso para referir a esto, como fundamento general, todas las acciones, son serios y no se asocian bien con una alegría volandera ni con la inconstancia de un hombre ligero.

5.4. Los espíritus de los hombres

5.4.1. En ellos predomina uno de estos géneros de sentimiento determinando el carácter moral, encontramos que cada uno de ellos se halla en próxima afinidad con uno de los temperamentos.

5.5. El sentimiento del honor

5.5.1. Es reconocido como característica de la complexión colérica, y las consecuencias morales de este delicado sentimiento, que casi siempre sólo se preocupa del brillo, nos presentarán rasgos para la descripción de este carácter