1.1. La impulsividad como rasgo de personalidad, implica una predisposición a responder de forma rápida y espontánea en general, y es considerada un factor temperamental, de fuerte sustrato biológico.
2. Búsqueda de Sensaciones.
2.1. Zuckerman establece la relación entre la conducta antisocial y la personalidad a partir de la variable búsqueda de sensaciones, ya que esta variable explica disgusto por las actividades rutinarias y gran implicación con experiencias o actividades intensas, impredecibles o de riesgo, que resultan muy gratificantes para el individuo.
3. Baja utoestima.
3.1. los adolescentes con baja autoestima tienen más conductas amenazantes e intimidatorias hacia otros así como que distintas dimensiones de la autoestima muestran una asociación negativa con la conducta desviada y que bajos niveles en ciertos componentes de la autoestima se revelan de la implicación en actividades delictivas.
4. Conflictos Matrimoniales.
4.1. Un estudio realizado en 2001 por Juby y Farrington, pone de manifiesto que la delincuencia de los jóvenes es influida por los conflictos familiares y la desintegración de la familia, hecho que ocurre antes del divorcio de los padres. Concluyen que es este conflicto el que empuja a delinquir a los hijos y no la separación en sí misma.
5. Factores ambientales
5.1. Los factores ambientales juegan un papel importante en la raíz y desarrollo de los trastornos de conducta. Una de las variables aceptadas por la comunidad científica respecto a los determinantes de la conducta antisocial, es el ambiente familiar y el tipo de patrones de aprendizaje que se emplean en la crianza de los hijos