Digitalización de los estudios de Comunicación: un pensamiento técnico que se inserta en una tradición de pensamiento.por luz milagros
1. Un nacimiento bajo la tutela de las ciencias humanas: Sólo lograron adquirir una verdadera coherencia epistemológica en la década de los ‘80 y fue necesario esperar hasta la década de los ‘90 para que la cuestión de las fronteras disciplinares fuera resuelta.
2. Planes de Estudio y perfiles profesionales: El aumento de los alumnos matriculados (y, en consecuencia, el incremento de egresados) obviamente repercute en los planes de estudio. A medida que se van saturando los lugares de trabajo tradicionales (radio, televisión, prensa, agencias de publicidad, etc.) las universidades van tratando de identificar –o inclusive contribuir a construir– nuevos posibles lugares de inserción laboral para sus futuros graduados.
3. La digitalización: Entendemos por “digitalización” la actualización de los planes de estudios para incorporar, tanto desde una perspectiva teórico-analítica como práctico profesional, todos los aspectos vinculados a las tecnologías digitales de la información y la comunicación. La llegada de estas tecnologías –y el consecuente impacto sobre el sector de las comunicaciones y el imaginario social– han incrementado aún más el interés por las carreras de comunicación en todos los países, más allá de la presencia efectiva de esas tecnologías en las respectivas sociedades. Si, como acabamos de ver, los estudios universitarios de comunicación de por sí atraían a los jóvenes, el nuevo clima digital en el que vivimos consolida esa tendencia.
4. Factores exógenos: Más allá de las políticas explícitas o implícitas del Estado en el campo educativo, y sin dejar de lado la mayor o menor sintonía entre la universidad y el mercado, es evidente que el contexto en el cual se desenvuelve la institución deja su huella en la agenda universitaria. Como veremos, una serie de factores de matriz política y económica-social han condicionado la entrada de los grandes temas de la comunicación digital en los estudios superiores de Comunicación. Factores endógenos: Más allá de la influencia del contexto político y social, cada universidad tiene la posibilidad de tomar decisiones que frenen o aceleren la digitalización de sus estudios de comunicación. Además de la voluntad institucional, existen otros factores que afectan a la universidad y que pueden llegar a condicionar la incorporación de contenidos digitales.
5. Los contenidos digitales: entre la teoría y la práctica: De la misma forma que proponemos no continuar pensando en comunicación “digital” en oposición a un tipo de comunicación “no digital” –teniendo en cuenta que todos los procesos comunicativos se encuentran mediados por el uso de estas tecnologías-, también afirmamos que resulta difícil estimar un proceso de formación en comunicación que pueda aún evitar la interpelación de lo digital.
6. Competencias del Comunicador Digital : Para construir este mapa de competencias digitales que un comunicador debe poseer se resolvió interpelar a profesionales y responsables de medios de comunicación e instituciones donde se desempeñen comunicadores. Comunicación digital: durante las entrevistas y focus groups realizados en ningún momento se mencionó la expresión “comunicación digital” ni la palabra “competencias”. Se trata evidentemente de dos conceptos académicos que aparecen «del lado del investigador». Sin embargo, en todas las intervenciones de los profesionales interpelados se destaca una cierta «inevitabilidad de lo digital» cuyo análisis a nivel discursivo iba más allá de los objetivos de este proyecto. Esto lleva a que la formación en cuestiones digitales sea considerada un atributo esencial del nuevo profesional de la comunicación.
7. La digitalización de los estudios universitarios de comunicación: Un mapa de situación: La masificación: Sin renegar de las especificidades de cada sociedad, elproceso de masificación de los estudios superiores de comunicación se verifica tanto en Europa como en América Latina, en universidades privadas o públicas, , y en sistemas altamente regulados como en otros de libre acceso a la educación.
8. Capacidad de autoformación: pocas instituciones dedican recursos a la formación, por lo que el profesional de la comunicación debe aprender a aprender. El reskilling –entendido como el mantenerse al día, actualizarse en el uso del software, conocer las nuevas tendencias del diseño, etc.– es un factor fundamental de los nuevos entornos laborales de la comunicación digital. Por otro lado, se consolidan nuevas formas de transmisión del saber dentro de los ámbitos profesionales (oralidad, distribución online, comunidades virtuales, etc.).
9. Infoxicación: el comunicador debe aprender a moverse en un entorno hiperpoblado de información. Algunos de los interlocutores entrevistados mencionaron la necesidad de que los comunicadores dominen «el arte de la búsqueda». El conocimiento de los motores de búsqueda es considerado insuficiente: el comunicador debe saber localizar información en la llamada «web profunda» y en las bases de datos.
10. Los años 2000: la edad de la madurez? utilidad fue el punto de partida de esta reflexión, hoy las cuestiones dominantes son los debates sobre el impacto y las consecuencias de las nuevas tecnologías (desde entonces se habla de TIC y la “N” de “Nuevas” desaparece). La tecnología digital no es un fin en sí mismo ni una panacea, pero induce nuevos modos de apropiación, nuevos comportamientos y llega a afectar hasta los principios teóricos más fundamentales de las ciencias de la información y de la comunicación. Antes, los estudiantes y los profesionales aprendían que el control de la información era la verdadera fuente del poder. Actualmente, aprenden que el poder está en la difusión de la información a gran escala.
11. La edad de oro: Lejos de dar un segundo impulso al sector, la explosión digital será paradójicamente, un factor de acentuación de la crisis de los sectores profesionales de la comunicación. La popularización de Internet dará por algún tiempo la ilusión de una nueva edad de oro: las grandes empresas, seguidas por las de menor tamaño, quieren “informatizarse”, tener acceso a las “autopistas de la información” como eran entonces denominadas, desarrollar su sitio web y dotarse de las TICs.
12. Profesionalización de los cursos académicos de comunicación: El desarrollo de las técnicas digitales aumenta de una manera significativa los niveles de competencias técnicas necesarios –o por lo menos requeridos– para tener acceso al mercado laboral. Desde el punto de vista del proceso de formación, dos tácticas son aplicadas: integrar a las técnicas digitales un enfoque estratégico, orientar la reflexión estratégica no sólo en un contexto universitario, sino también en los sectores profesionales.
13. Academización de los cursos profesionalizantes: El vínculo –y el dominio– de las ciencias humanas continúa siendo central. En cuanto a los departamentos “hijos de la revolución digital”, ellos permanecieron mucho tiempo marcados por la fascinación tecnologica. Estas realidades explican, sin dudas, la brecha que separa los dos mundos y la gran dificultad de pensar el espacio de lo digital dentro del mundo académico.
14. Polivalencia: este fenómeno atraviesa el mundo de la comunicación en todos sus niveles (medios locales, nacionales, privados, públicos, etc.) y ámbitos (radio, televisión, instituciones, etc.). El comunicador debe ser una figura polivalente, multimedia, capaz de producir contenidos en diferentes lenguajes y medios. En estafase el profesional de la comunicación aparece como un hombre orquesta, un virtuoso de la integración que domina muchos instrumentos pero de manera básica Polivalencia temática: los procesos de confluencia profesional promovidos por las tecnologías digitales están llevando a una polivalencia temática. Cada día es más común encontrar periodistas que cubren eventos para diferentes secciones (deportes, política, economía, etc.).
15. Fusión de ámbitos: un tema transversal que se deriva de los anteriores es la posible fusión de los entornos de trabajo (por ejemplo la fusión entre las redacciones de un diario impreso y su edición online). Los interlocutores que participaron de la investigación tienen posiciones opuestas. En algunos casos se mantiene una redacción única, en otros existen ámbitos separados pero coordinados. La misma tensión, con idénticos puntos de vista opuestos, atraviesa hoy el debate académico.
16. Teoría/Práctica: muchos entrevistados consideran que la formación teórica en general les otorga un plus en su desempeño profesional que se traduce inmediatamente en capacidad de análisis y capacidad de decisión comunicacional. Resulta sorprendente esta exigencia de mayores conocimientos «teóricos» por parte de profesionales y representantes de los medios