1. LA ECOLOGÍA ES UNA ANTROPOLOGÍA
1.1. En el nacimiento y desarrollo de la ecología humana destaca una necesidad, muy fácilmente olvidada por el pensamiento ecológico
1.1.1. existe un vínculo indisolu-ble entre la ecología y la antropología, es decir, entre una determinada concepción del mundo y una visión del hombre
1.1.1.1. El adjetivo ecológico connota siempre -incluso en el caso del tren, que está construido y puesto en ac-ción por un ser humano- una acción humana: por esta razón el estilo de la ecología humana es muy similar al estilo de la ética
1.1.1.1.1. El paso decisivo para ganar esa perspectiva es abra-zar simultáneamente la idea de la “ecología” y la idea de lo “ecológico”
2. La ecología es la ciencia de las relaciones entre los organismos vivien-tes y el medio ambiente.La ecología humana es el estudio de las interacciones humanas con el ambienteambiente
2.1. la ecología humana nació precisamen-te en oposición a las tendencias anti-antropocéntricas y utilitaristas que caracterizan la ecología profunda y superficial (Valera, 2014b).
2.1.1. Gerald Marten, uno de los investigadores más im-portantes en ecología humana, escribe: “El medio ambiente, en la ecología humana, se percibe como un ecosistema.
2.1.1.1. La combinación de dos tipos diferentes de conoci-miento -ciencia ecológica y humanidades- permitirá el descubrimiento de la dimensión humana, que es esencial para la preservación sostenible de nuestro planeta (Sears, 1954, p. 960)
3. UNA ANTROPOLOGÍA RELACIONAL PARA LA ECOLOGÍA HUMANA: HABITAR LA CASA
3.1. De una manera más radical que la nuestra, Ortega y Gasset sugiere que el hombre no tiene naturaleza, sino historia (Ortega y Gasset, 1983, p. 41)
3.1.1. El hombre se entiende como ser histórico, el animal no humano es entendido como ser en la historia.
3.1.1.1. La historia de la libertad es, pues, radicalmente di-ferente de la historia del ambiente, ya que coincide con la historia de la conquista del mundo, es decir, con su habitación
4. HABITAR LA CASA: LA ECOLOGÍA HUMANA COMO ETHOS
4.1. La construcción de la propia humanidad, que pro-cede de la objetivación del entorno de la cual solo un ser racional como el ser humano es capaz, es propia-mente el habitar
4.1.1. El habitar es el signo del dominio del hombre sobre la naturaleza, que transforma las cosas naturales en objetos, en entidades nombrables y en-tonces comprensibles
4.1.1.1. El hombre, por lo tanto, habita el mundo a medida que descubre en la natu-raleza un significado, que siempre la trasciende
4.1.1.1.1. habitar no es una de las prácticas del hombre, sino el carácter fundamental de la misma naturaleza humana
5. OIKOS-LOGOS: LA ECOLOGÍA HUMANA COMO CONSTRUIR Y CUSTODIAR LA CASA
5.1. El concepto de casa más que un concepto es propiamente una experiencia es extremadamente denso y difícil de entender habla de lo incalculable, de lo inconmensurable, de una intimidad que se configura como inaccesible a cualquier instrumento de precisión, ya que en última instancia, se basa en principios que no son reducibles a los meros hechos y que tampoco son observables
5.1.1. En este sentido, la ecología humana puede conside-rarse como la promotora de las relaciones (de la casa): la condición necesaria de la vida es la apertura, es su custodia, y es el reconocimiento de una alteridad que nos pide construir.