De Camino a la Psicología Jurídica
por Elízabeth Ramírez
1. ¿Las premisas Teóricas son foráneas?
1.1. En primera instancia se ubican teorías en Italia, Estados Unidos, España y Alemania, pero donde se hace realmente la difusión es América Latina. Sin embargo ha de tenerse en cuenta que los aspectos psicológicos y culturales están fuertemente enmarcados por el contexto sociocultural en el que se esté desarrollando el individuo o la comunidad. De ahí que en Latinoamérica se esté trabajando en la construcción de un conocimiento propio como lo destaca en sus congresos virtuales la Asociación Latinoamerica de psicología Jurídica y forense.
2. Que dice la Psicología Jurídica Iberoamericana
2.1. Que es más que un hacer porque, es un posicionamiento social donde se debe actuar consecuente de un pensar. Que como expertos en el comportamiento humano hay que proponer soluciones viables, integrales y eficaces. Y se debe fomentar la justicia social y la humanización de los jurídico involucrando entes gubernamentales y a la sociedad en general. Y no menos importante que como ciencia frente al objeto su comportamiento debe estar dirigido al estudio del comportamiento humano con consecuencias jurídicas.
3. ¿Dónde y cómo nació?
3.1. Data del siglo XIX. Se desarrolla de acuerdo a la época y desde diversos enfoques. Se convierte entonces en una rama de la psicología que se desempeñará dentro de escenarios legales ajustados según el Estado.
3.2. En otras palabras, esta rama ofrece a la sociedad una mirada interdisciplinaria a los conflictos que puedan surgir entre el ser humano y la ley.
3.3. Pero en Colombia, se empezó a ejercer la psicología jurídica, según López (1996), en el año de 1974; cuando se vinculó al Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses (INMLYCF) la primera psicóloga forense, la Dra. Victoria Eugenia Villegas Mejía.
3.3.1. Y son las Universidades como la San Buenaventura de Medellín, la Católica de Bogotá y la Santo Tomás quienes continuan el camino.
3.4. Un Punto Clave
3.4.1. Se podría decir que surge en 1984, gracias a las prácticas en cárceles como la Modelo y la Picota, porque se asume como principios, dos hechos: La capacitación del personal carcelario y la creación de equipos terapéuticos.