El deporte como conducta depredadora atavica

1. La clase ociosa no vive en, sino de la sociedad industrial y sus relaciones en el mundo del trabajo son de naturaleza pecuniaria.

2. El único estrato social que podría discutir a la clase ociosa hereditaria el honor de un espíritu guerrero convertido en uso social, es el de los criminales.

3. En la clase baja, entre los criminales de todo el mundo existe un deber social parecido, que ofrece al matón ocasión de mostrar su virilidad mediante la lucha no provocada con cualquier prójimo.

4. El niño reproduce esporadicamente y en miniatura viejas fases evolutivas del adulto

5. La notoria puerilidad del temperamento deportivo se advierte enseguida, si fijamos nuestra atención en el elemento de ilusión y engaño propio de toda actividad deportiva.

6. Esa propiedad la comparte el deporte con el juego infantil y con la gesta heroica, que tanto entusiasma al niño.

7. El deporte se distingue ademas del duelo, y de otros enfrentamientos similares en que se pueden reconocer en el otros motivos aparte del heroico, de crueldad.

8. El deporte permite al espiritu competitivo expresarse sin cortapisas, lo cual lo hace mucho mas atrayente.

9. Las características del temperamento depredador pueden parecer deseables por razones que nada tiene que ver con la economía.

10. Crueldad y astucia definen juntas, la actitud espiritual o el espíritu neo depredador

11. Cuando la actividad depredadora se realiza en comunidad.

12. Los países civilizados de Europa la clase superior hereditaria ah salva guardado ese espíritu en mayor grado que la clase media.

13. El impulso guerrero forma parte de un temperamento que es mas arcaico que el de la media de los adultos pertenecientes a la clase trabajadora

14. Se trata de manifestaciones competitivas de crueldad inocentes, no pensadas, y de acciones que se realizan consiente mente para conseguir prestigio

15. En el deporte se da en mayor medida que en otras manifestaciones por el gusto depredador por la competencia

16. Cualquier miembro aficionado el deporte justifica su actitud, ante si mismo y ante sus vecinos, y generalmente aduciendo que el deporte es un medio de educación inestimable.

17. No solo templa el cuerpo, si no que estimula supuesta mente, el espíritu varonil y eso no solo en el que practica el deporte, si no también en el espectador

18. La fuerza corporal que los juegos atleticos producen puede representar un beneficio tanto para el individuo como para la comunidad.

19. La valentía se manifiesta en la vida del bárbaro de dos formas diferentes: como violencia y como engaño