1. Marqués de Santillana
1.1. Posee una amplia producción poética. Ganó justa fama en su tiempo por sus poemas alegóricas a imitación de Petrarca; también fue el primer autor que escribió sonetos en nuestro idioma. Hoy en día se valoran sus composiciones de tipo más popular, como las serranillas:
1.1.1. Serranilla VII: Madrugando en Robledillo por ir buscar un venado, hallé luego al Colladillo caza, de que fui pagado. Al pie de esa gran montaña, la que dicen de Verzosa, vi guardar muy gran cabaña de vacas moza hermosa. Si voluntad no me engaña, no vi otra más graciosa: si alguna de esto se ensaña, lóela su enamorado.
2. Jorge Manrique
2.1. Nació en Paredes de Nava (Palencia) en 1440. Hijo de Rodrigo Manrique, maestre de Santiago. Murió en 1479 durante el asedio a un castillo. Presenta el modelo de hombre en el que se unen la pasión por las armas y las letras, práctica que comienza en este siglo. Destaca su poesía amorosa, su poesía moral. Esta obra que ha inmortalizado a Manrique: las Coplas a la muerte de su padre. Se trata de una composición formada por cuarenta coplas que reflexionan sobre la vida y la muerte de su padres, el maestre don Rodrigo
2.1.1. Coplas a la muerte de su padre (Jorge Manrique)
2.1.2. Este famosísimo planto trata temas como el de la fortuna o el poder igualatorio de la muerte y pregunta sobre el paradero de los que han muerto: Ubi sunt? (¿Donde están?). Las coplas están escritas en dobles sextillas de pie quebrado, se conoce como copla manriqueña, de rima consonante y esquema abcabc defdef. Manrique expresa con acierto el sentir medieval acerca del a muerte, a la vez que anuncia ideas renacentistas, al considerar que mediante la fama se puede vencer a la muerte y perdurar en la memoria de los vivos