1. LT
1.1. Origen
1.1.1. Médula ósea:
1.1.1.1. Al igual que otras células sanguíneas, las células T se originan a partir de células madre hematopoyéticas en la médula ósea.
1.1.2. Timo:
1.1.2.1. Las células T inmaduras migran desde la médula ósea al timo, un órgano ubicado en el pecho. Es en el timo donde maduran y adquieren su capacidad de reconocer antígenos específicos.
1.2. Maduración
1.2.1. Timo
1.3. Características
1.3.1. Receptor de células T (TCR):
1.3.1.1. Cada célula T posee un TCR único que le permite reconocer un antígeno específico.
1.3.2. Co-receptores:
1.3.2.1. Las células T también expresan co-receptores como CD4 o CD8, que ayudan a estabilizar la unión del TCR al antígeno y a transmitir señales al interior de la célula.
1.3.3. Marcadores de superficie:
1.3.3.1. Las células T expresan diversos marcadores de superficie que permiten su identificación, como el CD3.
1.4. Función
1.4.1. Respuesta inmunitaria:
1.4.1.1. Las células T son fundamentales para la respuesta inmunitaria adaptativa, lo que significa que reconocen y responden a patógenos específicos.
2. LB
2.1. Origen
2.1.1. Se originan en la médula ósea a partir de células madre hematopoyéticas.
2.1.1.1. Estas células madre tienen la capacidad de diferenciarse en distintos tipos de células sanguíneas, incluyendo las células B.
2.2. Maduración
2.2.1. Las células B inmaduras migran desde la médula ósea hacia los órganos linfoides secundarios, como los ganglios linfáticos, el bazo y el tejido linfoide asociado a mucosas (MALT)
2.2.1.1. Donde maduran y se vuelven competentes para responder a los antígenos.
2.3. Función
2.3.1. La principal función de las células B es la producción de anticuerpos.
2.3.1.1. Estos anticuerpos son proteínas especializadas que reconocen y se unen a antígenos específicos (sustancias extrañas para el organismo), como bacterias, virus o células tumorales.
2.3.1.1.1. Al unirse al antígeno, el anticuerpo marca al invasor para que sea destruido por otras células del sistema inmunitario.
2.4. Características
2.4.1. Especificidad:
2.4.1.1. Cada célula B produce un único tipo de anticuerpo, lo que le permite reconocer y responder a un antígeno específico.
2.4.2. Memoria:
2.4.2.1. Después de una infección, algunas células B se convierten en células B de memoria, que "recuerdan" al patógeno y pueden responder más rápidamente en caso de una reinfección.
2.4.3. Presentación de antígenos:
2.4.3.1. Además de producir anticuerpos, las células B también pueden presentar fragmentos de antígenos a otras células del sistema inmunitario, como las células T, para activar una respuesta inmunitaria más amplia.
3. Nombre: José Lee Chang
3.1. Cédula: 8-1016-2265
3.2. Grupo: 4.2
4. NK
4.1. Origen
4.1.1. Se originan en la médula ósea a partir de células progenitoras linfoides comunes.
4.2. Maduración
4.2.1. Médula Ósea
4.2.1.1. inician su maduración.
4.2.2. Órganos Linfoides Secundarios
4.2.2.1. Completan su maduración y adquieren su función efectora
4.3. Función
4.3.1. Citotoxicidad:
4.3.1.1. Su función principal es eliminar células infectadas por virus o células tumorales.
4.3.1.1.1. Lo hacen liberando gránulos citotóxicos que contienen perforina y granzimas, sustancias que inducen la apoptosis (muerte celular programada) en la célula diana.
4.3.2. Respuesta Inmune Innata:
4.3.2.1. Contribuyen a la respuesta inmune innata temprana, trabajando en conjunto con otras células inmunitarias.
4.3.3. Modulación de la Respuesta Inmune:
4.3.3.1. Pueden regular la respuesta inmune adaptativa
4.3.3.1.1. Interactuando con otras células como las células dendríticas y los linfocitos T.
4.4. Características
4.4.1. Carencia de Receptores Específicos:
4.4.1.1. A diferencia de los linfocitos T y B, las células NK no poseen receptores específicos para antígenos.
4.4.2. Receptores Activadores e Inhibidores:
4.4.2.1. Expresan una variedad de receptores en su superficie, algunos activadores y otros inhibidores.
4.4.2.1.1. El balance entre las señales recibidas por estos receptores determina si la célula NK atacará o no a una célula diana.
4.4.3. Marcadores Fenotípicos:
4.4.3.1. Se caracterizan por la expresión de ciertos marcadores de superficie, como CD16 y CD56.
5. NKT
5.1. Origen
5.1.1. Son un tipo de linfocito T que se desarrolla en el timo, al igual que otras células T.
5.2. Maduración
5.2.1. Timo
5.2.1.1. donde se seleccionan las células que expresan un TCR funcional y específico para los antígenos lipídicos presentados por CD1d.
5.2.2. Órganos linfoides secundarios,
5.2.2.1. como los ganglios linfáticos y el bazo.
5.3. Función
5.3.1. Respuesta inmunitaria innata y adaptativa:
5.3.1.1. Las células NKT juegan un papel crucial en ambas respuestas inmunitarias.
5.3.2. Reconocimiento rápido de patógenos:
5.3.2.1. Su TCR les permite reconocer rápidamente antígenos lipídicos de diversos patógenos, como bacterias y virus.
5.3.3. Activación de otras células inmunitarias:
5.3.3.1. Una vez activadas, las células NKT liberan una gran cantidad de citocinas que pueden activar a otras células inmunitarias, como las células T y las células B, para iniciar una respuesta inmunitaria más amplia.
5.3.4. Modulación de la respuesta inflamatoria:
5.3.4.1. Las células NKT también pueden ayudar a regular la respuesta inflamatoria, lo que es importante para prevenir el daño tisular.
5.4. Características
5.4.1. Expresión de un TCR restringido:
5.4.1.1. Como mencioné antes, las células NKT expresan un TCR que reconoce antígenos lipídicos presentados por CD1d.
5.4.2. Coexpresión de marcadores de células NK:
5.4.2.1. Además del TCR, las células NKT también expresan marcadores característicos de las células NK, como el CD16 y el NK1.1.
5.4.3. Heterogeneidad fenotípica y funcional:
5.4.3.1. Existen diferentes subtipos de células NKT con diferentes funciones y perfiles de expresión génica.